Si hubiera que definir el contenido de este blog, probablemente sería una tarea complicada.
¿Ilustración? ¿Customización? ¿Animación? ¿Dibujo? Etc., etc...
Soy la primera consciente de que el centrarse en una cosa no es lo mío, y si no que se lo digan a mis ex-profesores de violín, teatro, pintura, Alemán, Italiano, escultura y demás disciplinas que nunca dominaré, pero que al menos toqué y cuyas pinceladas básicas poseo gracias a este culo inquieto.
Y aunque ahora me encuentre por fin más o menos centrada (si más o menos centrada quiere decir trabajando en un estudio de animación a la vez que ilustro y pinto mis zapatillas y mis cosas), nadie me quita los cinco años que pasé en la Universidad estudiando Comunicación Audiovisual, con el cine como objetivo.
Que más adelante me diera cuenta de que lo que quiero es dibujar ese cine, es otro asunto.
A lo largo de esos 5 años, además de conocer a algunos de los mejores amigos que tengo, hice muchas cosas divertidas. Rodar un videoclip en una tarde, preparar un corto que ríase Lost in La Mancha, dibujar figurines para otros rodajes, o incluso trabajar como ayudante de vestuario en El 2 de Mayo, película de Garci que no he llegado ni a ver todavía.
Pero lo mejor de lo mejor, lo que recordaré toda mi vida con inmenso cariño, fue otra cosa.
Y es que a este blog he subido carátulas de CD, zapatillas pintadas, capturas de videojuego dibujadas sobre uñas, ukeleles-camaleón...
Pero hoy lo que subo es una película.
Billy Freud's Last Night comenzó siendo un cortometraje ideado por sus directores, Pablo Maqueda y Pedro Román, en los pasillos de la facultad de Ciencias de la Información de la UCM. En esa etapa del proyecto, cuando todos contábamos 20 años y estábamos a caballo entre 2º y 3º de carrera, me ofrecieron ser la Directora de Arte, algo que acepté encantada y que aún les agradezco.
Pero por causas que todavía no acierto a comprender, Pablo y Pedro consiguieron los suficientes apoyos y financiación para que su proyecto tomara la forma de un largometraje. Un largometraje que tendría que ser rodado en 11 días repartidos en varios fines de semana de noviembre a diciembre de 2005.
Y lo conseguimos.
Dormimos poco, pero lo conseguimos :)
No voy a decir nada más; la película habla por sí misma. Espero que la disfrutéis casi tanto como yo, que no me cansaré jamás de v
er en ella a la gente con la que sigo quedando cada fin de semana para ir al cine.
¡Nos leemos pronto!
