En sólo una semana he recorrido el Paseo de la Fama de Hollywood, el teatro Kodak, Beverly Hills, Sunset Boulevard, he ido en coche a Las Vegas y he visto aparecer sus neones en el horizonte, he apostado en casinos (pero poco xD), he metido billetes en tangas de strippers, he sobrevolado el Cañón del Colorado en avioneta, he sacado el cuerpo a través del techo de una limusina, he comido tortitas tan grandes como mi cabeza, he recorrido la costa de California, he paseado por una playa perdida rodeada de focas y leones marinos, he tocado el Pacífico...
¡Maestro!
Esto parece mucho para sólo una semana, pero ¿qué diréis si os digo que lo mejor de todo sucedió sólo en un día?
El 17 llegamos a San Francisco por la noche, con la poca energía que nos dejaron los 3 días en Las Vegas, y tras un paseo por Union Square para saciar el fetichismo Melanie Daniels que arrastro desde la carrera, nos fuimos a descansar sin saber realmente si el día siguiente sería un desastre, pues estar descolgados de Internet hizo que nuestros planes se quedaran en el aire.
A la mañana siguiente Riqui y yo nos separamos del grupo, y tras un intercambio de mails y de llamadas, nuestro primer destino quedó fijado: ¡PIXAR!
Gracias a nuestro amigo Javier de Prado , que movió los hilos desde Madrid (gracias, Javi ;^D) tuvimos la oportunidad de entrar en estos estudios de la mano de Edward Robbins, a quien quiero agradecer sinceramente el tour que nos dio mientras nos emocionábamos como dos quinceañeras en un concierto de Tokio Hotel. Y es que no es para menos... No todo el mundo tiene la suerte de poder sacar esta foto :^D
Durante la comida nos presentaron a algunos españoles que trabajan allí y a los cuales envidio profundamente TT__TT No me quiero enrollar mucho, así que lo resumiré en que fue simplemente una mañana espectacular. Ah, y en que tuve entre mis manos una parte del storyboard original de Wall-E que estaba por ahí tirado o__O
Regresamos a San Francisco desde Emeryville con toda la tarde aún por delante, y nos dirigimos a la Apple Store de Stockton Street para mirar el correo gratis, como probablemente hace el 75% de la gente que entra en estos lugares. Queríamos comprobar si Tim Schafer iba a poder recibirnos finalmente, y cuál fue nuestra alegría al ver que había respondido que sí ^___^
Iniciamos nuestro camino a pie hasta las oficinas de Double Fine, y llegamos con el tiempo justo. Una cosa que me sigue sorprendiendo es que hasta este momento no nos perdimos jamás, cosa realmente inusual en mi caso dado mi (nulo) sentido de la orientación. Todo estaba saliendo a pedir de Milhouse.
Supimos que estábamos ante la puerta adecuada al ver el Eddie Riggs que nos miraba desde el otro lado del cristal. La chica que abrió ya estaba sobre aviso, y nos llevó, mientras mi cerebro intentaba terminar de asimilar dónde estaba, al despacho de Tim Schafer, donde él mismo nos recibió con la gran simpatía que todos sospechábamos que tenía :)
Tim nos enseñó las oficinas de Double Fine, donde me daban ganas de pasar de mis vacaciones y sentarme a trabajar, la verdad. Al fin y al cabo, allí se gestaron esos dos grandes juegos que son Psychonauts y Brütal Legend, cuyo concept art se encontraba colgado por todas partes. Definitivamente, tengo que empezar a pegar mis bocetos por las paredes en casa, queda muy cool :P
Dado que me invitó a ir por mi devoción hacia los juegos clásicos, Tim quiso mostrar también los recuerdos que se trajo consigo a su nueva compañía. Y aquí comenzó el hypeo más absoluto. Tuve ante mis ojos demasiadas cosas como para comentarlas todas, pero me sorprendieron especialmente algunos bocetos originales de Grim Fandango, su storyboard original (aaagh, el único e irrepetible... le dijimos, probablemente también de vuestra parte, que debería publicarlo), cajas del primer Monkey Island todavía precintadas (con su disco de claves dentro, nunca utilizado x__x), versiones del Day of the Tentacle en chino y hebreo, una figurita de un perro muerto modelada por Steve Purcell en el instituto, una réplica del Tour Bus de Brütal Legend que ganó el Derby de Red Bull... y lo más sorprendente de todo: unos moldes de galleta con forma de tentáculo que hizo el propio Tim Schafer para preparar dulces para la fiesta de presentación del diseño de Day of the Tentacle.
Nos dio uno a cada uno ^___^ Ni que decir tiene que pienso hacer galletas. Unas galletas que darán +50 en carisma a todo aquel que las coma :^D
Tras nuestra visita, pude hablar un buen rato con él y entregarle mi regalo: unas pequeñas Converse para su hija Lili. Parecieron gustarle mucho, así que estoy muy muy contenta ^___^
Hace poco subió una foto de Lili con ellas puestas a su muro de Facebook. Aún le quedan bastante grandes, era complicado adivinar la talla! Pero seguro que dentro de nada le quedarán perfectas :3
En definitiva, nuestra tarde en Double Fine fue divertidísima, haber conocido a Tim significa mucho para mí porque es alguien cuyo trabajo admiro desde muy pequeña. Fue simpatiquísimo con nosotros, y resultó inspirador conocer a alguien que ha logrado dedicarse a lo que le gusta y que disfruta tanto con su trabajo. Un punto más para la gente con pasión, que es la que mueve el mundo. Ver a tanta gente cumpliendo sus sueños en Pixar y Double Fine me ha reafirmado en mi decisión de no perder la mía por mucho que me cueste conseguir lo que quiero.
Y sobre mi día en San Francisco ya poco hay que contar. Terminé tan agotada como emocionada, y ni siquiera había hecho turismo ni había visto el Golden Gate. Pero ¿sabéis qué? Que le den al Golden Gate. No hubiera aprovechado mejor el tiempo ni aunque hubiera recorrido cada lugar turístico al milímetro. Y tras visitar esta ciudad, estoy aún más convencida de que viviré allí algún día, así que ya tendré Golden Gate para hartarme :)
¡Nos vemos por aquí en breve!
